Nuevo film de Kurosawa que nos trae a Sitges un thriller complejo y que lamentablemente no me acaba de convencer a pesar de sus muchas virtudes. Nos presenta a un inspector de policía llamado Takakura que tras un incidente se aparta del cuerpo para dar clases. Junto a su mujer, se muda a una nueva casa en la que tiene un inquietante y misterios vecino. Mientras tanto, un compañero le insta a investigar un viejo caso de asesinato de hace tres años sin resolver.
Creepy tiene casualidades de esas que chirrían bastante, una policía de lo más inepta, un villano muy atípico, a veces es aterrador y extraño y a veces es ridículo y patoso, a más de unas cuantas decisiones de guión que me acaban sacando de la película y haciendo que no funcione, hay demasiadas cosas que no me cuadran y no me convence los giros que van tomando los acontecimientos. Esto hace que la película funcione a ratos si y a ratos no, pero los ratos que no son demasiados y lastran en exceso.