No se en que momento pensé que La Propera Pell era una película para mí, porque no lo es, el director Isaki Lacuesta nos ofrece un drama de un adolescente perdido hace 8 años que finalmente reencuentra a su familia e intentará adaptarse a una nueva vida que no siente ya como suya, entre otras cosas debido a un problema de memoria que le impide recordar muchos detalles de cuando era pequeño.
Se juega durante todo el metraje con la posibilidad de que el joven sea en realidad un impostor, de que esa no sea su familia, vemos que tiene problemas de autocontrol y que pierde los nervios en varias ocasiones, además de que se preocupa en todo momento de investigar y de saber cosas sobre su pasado de las que dice no acordase. Yo esperaba que al final llegará el momento de que se volviera loco y montará una matanza de sangre, pero nada, los tiros van por otro lado.
Me parece un film la mar de correcto, eso si, con una buena interpretación de Álex Monner, aunque al final siempre acaba haciendo más o menos el mismo papel de joven conflictivo, y con un gran Sergi López y una gran Emma Suárez, pero definitivamente no es para mi, creo que su público más directo es adolescente, y tampoco es la película que vengo a ver a Sitges, si me la encuentro un día en TV3 pues mira, aún, pero no en el Festival donde se prima el fantástico. La razón seguramente sea que ya me hago viejo para esta mierda, y que estas historias de adolescentes que buscan encajar ya me pillan cada vez más lejos y más fuera de lugar.