She Dies Tomorrow es una de las películas que más opiniones polarizadas ha generado en Sitges, desde los que la consideran una maravilla a los que opinan que es un peñazo. Personalmente me aproximo más a este segundo grupo que al primero, a pesar de que compro que parte de una idea muy interesante, pero que queda muy desaprovechada en un guión pobre y demasiado contemplativo.
Amy es una mujer que de repente vemos empieza a preocuparse y ha comportarse de forma extraña. Cuando su amiga llega por la noche a casa, esta la confiesa que sabe que va a morir mañana, pero evidentemente, no se la cree y se marcha a su propia casa. Al rato, algo extraño sucede (lo que viene siendo unas luces que cambian de color), y la amiga tiene la misma sensación, saber con certeza que va a morir mañana. Empieza así una ola de contagios a todos aquellos con los que tienen contacto, y a cada uno le afectará de una forma diferente.
Si She Dies Tomorrow pretendía ser una reflexión sobre la muerte, creo que no lo consigue. Me gusta que se trate de una especie de enfermedad contagiosa y que se vaya propagando como si fuera histeria colectiva, y ver como aquellos que son incrédulos al rato acaban cayendo en lo mismo. Tiene algún que otro momento logrado, pero demasiadas veces se va por las ramas, no me interesa una conversación sobre delfines follando, en vez de centrarse en los personajes y ahondar más en ellos, por lo que resulta al final una propuesta fallida incapaz de profundizar en su propio concepto y aprovechar un buen punto de partida.