Exhuma viene precedido de un gran éxito en Corea, y es sin duda de los más esperados de esta edición. Se trata de un film de terror que combina muy bien elementos históricos con el folk horror y con el misterio que presenta. Todo empieza cuando una joven chaman y su aprendiz son contratados por una adinerada familia para investigar la causa de una inquietante enfermedad sobrenatural que afecta sólo a los primogénitos de cada generación. Con la ayuda de un experto funerario encontrarán la causa en una vieja tumba escondida en la que encontrarán oscuros secretos.
Exhuma se divide en dos partes bien diferenciadas presentándonos dos misterios ligados entre ellos, y la película se divide en varios capítulos. Sorprende ver como en su primera mitad todo se desarrolla de manera bastante rápida tras la presentación de los personajes, y es que aun quedaba misterio por descubrir cuando parece que ya todo ha acabado. El nexo de unión entre las dos partes, ese giro que da pie a la segunda parte me parece bastante logrado e inesperado.
Quizás la segunda mitad sea un tanto más difícil de conectar con ella por tener un elemento sobrenatural un poco más complicado de entrar en él, pero hay que reconocer que si algo hace bien el film es crear una atmósfera y unas secuencias de lo más emocionantes y tétricas, que se mezclan con el folclore y las tradiciones, con esos rituales que aquí nos pueden parecer de lo más extraños pero que forma parte de la cultura asiática como ya hemos podido ver en muchas otras películas.
Quizás las expectativas estaban muy arriba, pero a pesar de que me ha parecido un film muy notable que juega muy bien con sus elementos de terror combinados con el drama y el misterio, le puedo encontrar alguna que otra pega, como que resulta un tanto liada toda la explicación del propósito de la tumba y hay que estar muy al tanto para poder entenderlo todo bien, algo que suele ser bastante habitual en el cine coreano, sobre todo en los thrillers en los que no te puedes perder ni un detalle.