Una de las películas más esperadas en el Sitges de este año, y además contaba con la presencia de propio Ti West presentando, que nos cuenta como se gestó esta precuela, y es que, con el presupuesto que se ahorraron al no viajar para rodar X, planteó a la productora aprovechar y rodar este film, que se realizó en tan solo dos semanas. Y hay que admitir que para haberlo hecho con prisas el resultado es bastante bueno.
Pearl es la historia de la vieja asesina de X, que nos cuenta su dura juventud cuidando de su padre enfermo y con una estricta madre siempre encima de ella. Pearl sueña con los musicales que a veces ve cuando se escapa al cine del pueblo, y quiere convertirse en una estrella como las de la gran pantalla, pero aunque la situación en su casa es un impedimento, ella está dispuesta a cualquier cosa por lograr sus sueños.
Pearl funciona perfectamente como complemento de X, con un aspecto visual muy colorido y propio de la era cinematográfica que retrata, un film que se va cociendo a fuego lento sin que para ello sufra en ningún momento de falta de ritmo y con una Mia Goth implicadísima y merecida ganadora del premio a mejor actriz este año. Y es que la actriz nos regala una actuación soberbia y llena de matices, y además también participa en el guion junto al director.
El film es un retrato de una joven con aspiraciones que se ven truncadas por su particular situación familiar y como ella se sirve muchas veces de la violencia como vía de escape. West consigue realizar un film que no solo no huye de los tópicos, sino que se sirve bien de ellos e incluso los parodia, saliendo airoso gracias a Goth y su actuación, que no era nada fácil.