Cuando se anunció la colaboración entre el director Sion Sono y el actor Nicolas Cage en un film titulado Prisoners of the Ghostland nos pusimos todos a frotarnos las manos con lo que podía llegar a salir de aquí, lo que no imaginábamos es que fuera a ser algo tan anodino e insustancial como ha resultado ser, dejando claro que Sion Sono no ha sabido aprovechar la oportunidad de ofrecer algo gamberro y divertido con Cage, y tan solo encontramos pequeñas pinceladas de lo que pudo haber sido.
Como si fuera una especie de Rescate en Nueva York en un mundo post-apocalíptico con aires de Mad Max y estética samurai, el personaje de Cage es un preso al que se le encarga la misión de encontrar a la nieta adoptiva de The Governor a cambio de la libertad, para ello tendrá que llevar un traje de cuero que se autodestruirá en cinco días y que además esconde alguna que otra trampa más, que al final son las que nos dejan algunos de los mejores momentos del film.
La película es tan solo una sombra del Sion Sono gamberro que deslumbraba años atrás con películas como Love Exposure o Why Don´t Play in Hell?, y ya lleva unos cuantos años dando tumbos con muchas películas en las que acierta tan solo a veces, como la estupenda aunque algo excesiva The Forest of Love. Prisoners of the Ghostland es una oportunidad perdida que nos ha dejado decepcionados, parecía imposible que de esto pudiera salir algo aburrido, pero desde luego lo consigue con creces.