Edgar Wright nos trae un thriller de terror y misterio en el que una joven apasionada con los años 60 llamada Eloise se verá transportada a esa época en un espectáculo de luz y fantasía, poniéndose en la piel de una aspirante a cantante de nombre Sandie. Todo es brillo, color y felicidad en los 60, Sandie es una joven desinhibida y atrevida que está dispuesta a cumplir su sueño, lo que hace que en el presente, Eloise se contagie de su entusiasmo y de su aplomo, y lo que era una joven tímida y apacible, se va transformando en una joven más segura de su misma imitando a su adorada estrella.
Pero no todo es fácil en los 60, y aquí es donde Wright va adentrándose en la oscuridad y cambiando este relato de fantasía alegre y lleno de sueños en una pesadilla casi sin que nos demos cuenta, adentrándose en el terror de una manera sutil hasta que llega a transformar completamente la película.
Last Night en Soho era una de las más esperadas este año y ha convencido a prácticamente todo el mundo por su manera de abordar el género desde un punto de vista fresco y diferente, con dos actrices fenomenales, que se habla mucho de Anya Taylor-Joy, pero Thomasin McKenzie no se queda atrás y está espectacular. Va a ser una de las películas del año, no me cabe la menor duda.