Comedia de terror cuyo mayor aliciente es ver a Demi Moore en un papel muy alejado de los que nos tenia acostumbrados en su buena época. Nos encontramos con un grupo de gente que trabaja para Moore en una empresa de cubiertos comestibles que unir lazos pasan un fin de semana en Nuevo México haciendo espeleología. Pero un terremoto hará que se queden atrapados en una cueva profunda.
Hay que reconocer que el papel de jefe engreída, pija y autoritaria le va que ni pintado a Demi Moore, que además le sabe sacar todo el provecho que le da el personaje. Por lo demás, nos encontramos con una comedia bastante simpática aunque algo blandita donde al ver que pasan los días sin ser rescatados tendrán que debatir sobre si comerse unos a otros.
Personajes bastante bien retratados hace que te caigan bien desde buen principio y que te rías con ellos y sus disputas laborales, tirándose los trapos sucios unos a otros en medio de una situación desesperada.