Brad Anderson siempre es un cineasta interesante a tener en cuenta y con Fractured consigue realizar un thriller capaz de mantenerte pegado a la butaca hasta el final, expectante por saber quien tiene razón, si el hombre que busca desesperadamente a su mujer y a su hija en un hospital donde han desaparecido ó el resto de la gente que lo toman por loco, sí hay realmente algo oculto y oscuro en el lugar o sí realmente ha perdido la cordura.
Sam Worthington interpreta a un hombre que viaja con su esposa y su hija, al parar en una estación de servicio, él y su hija sufren una caída, y la pequeña parece haberse roto el brazo. Acudirán hasta un hospital cercano donde empezará su pesadilla.
Fractured es uno de esos thrillers que juega todo el rato con el espectador, llevando de un lado a otro y a plantearse en todo momento cual es la verdad que vale. Y cuando se hace bien, funciona de maravilla, me dejo llevar por este tipo de films a pesar de saber que hay trampa en todo momento esperando un final revelador que esté a la altura, y aquí, eso también funciona bien, con lo que no se le puede pedir mucho más.