Steven C. Miller, director de films como Scream of the Banshee o Silent Night, el último no lo he visto pero el primero es un peñazo de muy señor mío, sigue en su línea con este nuevo film, un intento, según anunciaban, de homenajear al cine de los 80 de Spielberg como los Gremlins o Poltergeist que no yo he visto por ninguna parte, salvo las pintas de los hermanos que pueden ser efectivamente un poco ochenteras.
Neal vuelve a casa después de pasar dos años fuera. La muerte de su madre y su certeza de que un monstruo acechaba bajo la cama obligó a su padre a procurarle un cambio de aires. Al volver se encuentra con una nueva madrastra y con su hermano menor que está aterrorizado por el mismo monstruo que lo amenazó a él. Neal y su hermano tendrán que enfrentarse al monstruo que aparece por las noches y a la ira de su padre, incapaz de entender lo que sucede y que tan solo desea tener una familia normal.
La idea es buena, dos hermanos luchando contra un misterioso monstruo que aparece debajo de la cama por la noche, la pena es que esté desarrollada de una manera tan chapucera, sin apenas continuidad entre escenas y con unas escenas de susto lamentables y sin pizca de imaginación ni inventiva.
Under the Bed funciona cuando los dos hermanos hablan y planean como enfrentarse a esta amenaza, pero falla en las escenas clave de más acción, este tipo parece que no sabe rodarlas, en las de sustos, tampoco sabe, y sobre todo en ligar todo el conjunto con un mínimo de coherencia y cohesión.
Todo nos lleva a un final que es tan precipitado como desmesurado, en el que el monstruo se desata y empieza una carnicería sin mucho sentido y cuya escena final está muy mal rodada, vale que no haya presupuesto para mostrar mucho, pero tampoco creo que haga falta hacer algo tan cutre como ni tan siquiera mostrar la muerte del monstruo. Me da la sensación, viendo este final, en que realmente este era el propósito del film, que al director le apetecía rodar una gran escena de gore con un monstruo de por medio y un par de chavales enfrentándose a él, como si todo lo visto anteriormente, que en teoría a de prepararte para el clímax final, sea tan solo una excusa para lo que realmente interesa, un final a lo grande. El problema es que este final no encaja de ninguna manera con todo lo visto anteriormente, con lo que es imposible que logre el impacto deseado.
Tampoco le echaremos toda la culpa a Miller, ya que creo que gran parte e la culpa es también que el film cuenta con un guión muy flojo que tan solo se salva gracias a las conversaciones entre los hermanos, y esto es porque al menos los jóvenes actores cumplen con sus papeles de manera bastante solvente. No me importa que no me cuenten el origen del monstruo, prefiero eso a que me intenten colar ridículas teorías que parece que hayan metido para intentar dar una explicación que no se aguanta por ningún lado.
En definitiva, que creo que el señor Steven C. Miller ya me ha visto suficiente el pelo y que la próxima vez que me plantee ver uno de sus films me lo pensaré dos veces, todo y así le doy un par de unicornios, porque al menos dura poco y tiene algún punto, como he comentado, en que se salva de la quema total.