Netflix nos trae Things Heard & Seen, film que apunta a película de terror y casa con fantasmas pero que se olvida demasiado que se trata de una película de terror sobrenatural, liándose con cosas que no viene a cuento y que no hacen más que encallar la trama, que no sabe muy bien lo que quiere ser, si una pelí de terror, una de psicópata o una pelí de tarde con matrimonio en crisis.
El film adapta la novela La Apariencia de las Cosas de Elizabeth Brundage que no he leido, con lo que no os puedo decir hasta que punto es fiel o no. Nos situamos en el año 1980, y nos presentan a un joven matrimonio atractivo que se muda de Nueva York a un pequeño pueblo donde el marido ha obtenido una plaza para dar clases. Lo que parece una idílica pareja con una hija pequeña, no tarda en dar muestras de que no todo es tan perfecto como parece y que tienen sus más y sus menos.
Ella pasa el día en casa, con lo que no tarda en darse cuenta de que hay una extraña presencia allí. Pero claro, primero hay que meter a con calzador a un par de adolescentes para que nuestra pareja perfecta puedan flirtear con ellos y así mostrarnos que su matrimonio se tambalea cosa mala. También empezamos a descubrir que él es un capullo de cuidado, y que esconde secretos que iremos descubriendo gracias a conversaciones y encuentros casuales tan forzados que resultan ridículos. Esto hará que él empiece a perder los papeles y a intentar tapar como sea sus mentiras.
Things Heard & Seen es un baturrillo de géneros donde no acaba de funcionar ninguno de ellos y que hacen que sus dos largas horas de duración se hagan eternas, algo que ni siquiera la presencia de Amanda Seyfried es capaz de hacer más llevadero, aunque es de lo poco que se puede rescatar de este desastre de proporciones mayúsculas, del cual tampoco vale mucho la pena seguir escribiendo.
![](https://www.masalladeorion.net/wp-content/2021/04/things-heard-poster.jpg)