Buen debut en la dirección del actor Dave Franco, que nos sumerge en un intrigante film de terror en el que se aleja de la vertiente más comercial de sustos y sobresaltos para centrarse en crear unos buenos personajes y sobre todo en fabricar con muy pocos elementos una atmósfera de tensión y de mal rollo que no hace más que ir en aumento.
The Rental empieza cuando para celebrar que han cerrado su primer trato en la nueva empresa, Charlie y Mina, deciden alquilar una alejada casa cerca de una playa para pasar un fin de semana con sus parejas, Charlie y Michelle, y Mina con Josh, que es el hermano pequeño de Charlie. Está claro que le fin de semana no será tan apacible como esperaban.
Franco no pierde oportunidad de ir perfilando los personajes y preparando el terreno, desde la tensión sexual que se intuye en Charlie y Mina, hasta los problemas para alquilar la casa que ha tenido Mina por tener un apellido no demasiado norteamericano, algo que se encargará de recordarle al parco encargado de la casa al llegar y que hace clara referencia a una situación de racismo. Una escena aquí y otra allá que ya van creando pequeñas dosis de mal rollo.
The Rental lleva al extremo la conocida ley de Murphy, que dice que si algo puede salir mal, saldrá mal. Y va poniendo a los personajes en jaque, en situaciones que no paran de volverse cada vez más complicadas y extrañas y sobre las que tendrán que tomar decisiones que no serán fáciles y que pueden poner en riesgo sus vidas.
Al final, The Rental no deja de ser un slasher pero algo maquillado en el que durante su primera hora no sabes muy bien que esperar, y que finalmente se revela y se convierte en una película distinta que sabe resolver la papeleta de manera contundente pero sin darle demasiadas vueltas, yendo al grano de manera eficiente.
Unos actores solventes dan vida a las dos parejas protagonistas y Franco se encarga de ir creando momentos de mal rollo y situaciones incómodas que podrán a los personajes al filo del abismo en un film repleto de giros que no paran de complicarse, haciendo que el tranquilo fin de semana se vuelva cada vez más siniestro. Si Dave Franco sigue por este camino vamos a tener un nuevo director de género a tener muy en cuenta.