El cine español toca muchos géneros y en alguno de ellos ha sabido destacar en algunas épocas, pero la ciencia ficción nunca ha sido un género en el que haya prodigado mucho y pueden contarse con los dedos las producciones anuales de este tipo, con lo que después de la decepción de Luna y la sorpresa de La Ballena, tenia muchas ganas de comprobar que tal estaba esta Justicia Artificial y, salvo alguna pega, las sensaciones han sido bastante buenas.
Justicia Artificial es un thriller de ciencia ficción dirigido por Simón Casal que nos presenta un interesante debate sobre la Inteligencia Artificial, con una trama que se centra en la utilización de esta tecnología en la Administración de Justicia, con lo que se pretende automatizar y despolitizar sustituyendo a los jueces por un programa de I. A. El Gobierno tiene pensado lanzar un referéndum para aprobar este sistema, pero Alicia Kóvack, una de las creadoras de la empresa que desarrolla el programa se muestra contraria de repente alegando que el sistema no está todavía a punto.
Kóvack tiene un accidente de coche en el que fallece justo después, y la empresa, siguiendo sus instrucciones, contacta con Carmen Costa, una reputada jueza, para que haga una auditoria sobre el sistema y de su visto bueno. Costa empezará a investigar y a descubrir que se esconde detrás del accidente de Kóvack y los intereses ocultos tras el programa.
Simón Casal rueda un thriller muy sobrio y elegante, incluso con ese aire frio del cine nórdico que le sienta muy bien. El film nos destapa las virtudes y los puntos flacos de esta tecnología, descubriéndonos además algunos secretos sobre la Inteligencia Artificial que nos demuestra que no es tan imparcial y equitativa como cabía esperar, al final, ha sido creada y es controlada por el ser humano, que es capaz de modificarla y alterarla a su antojo.
Justicia Artificial funciona mucho mejor cuando reflexiona sobre el conflicto de usar la I.A. y sus repercusiones a nivel socio-político, así como la investigación que nos va enseñando cuales son los problemas de usar esta tecnología, que cuando juega al thriller de conspiración y de asesinato. Con lo que empieza muy bien, pero en su tramo final se dispersa con algunas decisiones que no aportan gran cosa y con una resolución del caso en una escena final un tanto apresurada y poco efectiva.
En lineas generales, diría que es un film que merece bastante la pena y cuyas disertaciones sobre la I.A. son más que interesantes dentro del escenario que plantea, aunque es una lástima que no acabe de ser del todo redondo en su faceta más de thriller y en su resolución no muy acertada.

Lo Mejor
- El debate que plantea sobre la IA y como desgrana esta tecnología para lo bueno y lo malo
Lo Peor
- Su tramo final que se va un poco por las ramas