El tema de la supervivencia de la raza humana se ha tratado en infinidad de ocasiones en el cine en sus más diversas vertientes, pero Air nos ofrece un punto de vista un tanto novedoso. Las películas nos han metido la idea en la cabeza, vete tú a saber si real o no, de bunkers preparados para acoger a lo mejor de la humanidad en cápsulas de hibernación en caso de catástrofe a esperar a que pasara la amenaza para luego poder resurgir como ave fénix de las cenizas.
Air toma esa premisa desde el punto de vista de dos operarios que se despiertan de su estado de hibernación cada seis meses para hacer comprobaciones durante dos horas de los sistemas. El aire se ha contaminado en la superficie y tan solo quedan unos cuantos bunkers llenos de humanos con igual funcionamiento. Cada seis meses, dos operarios se levantan y confirman entre bunkers que todo funciona correctamente, pero en uno de ellos, un incidente pondrá en peligro la vida de sus operarios a menos que puedan solucionar el problema.
Christian Cantamessa debuta con un original thriller de ciencia ficción en un espacio cerrado claustrofóbico y con tan solo dos personajes y el peso de la responsabilidad sobre sus hombros de mantener al futuro de la raza humana a salvo. Estamos frente a un film de factura sencilla pero efectiva, que tira de tecnología retro como recurso tanto estilístico como evidentemente económico, pero que como hoy día está de moda recuperar los ochenta queda la mar de bien.
¿Vale todo para sobrevivir? Nuestros protagonistas tendrán que enfrentarse a esta difícil encrucijada cuando vean peligrar sus vidas. Resignarse a morir o bien cruzar la línea moral que te permita seguir con vida será un dilema que ambos tomarán de distinta manera.
En un film de estas características la labor de sus actores es un pilar fundamental, y tanto Norman Reedus como Djimon Hounsou demuestran tener tablas de sobrar para superar el reto a pesar de que el primero parezca encasillado en el típico papel de malote y duro que ya nos muestra en Walking Dead.
A pesar de todo, uno no puede evitar tener la sensación que es una buena idea la que nos muestra Air y que quedaría cojonuda en un capítulo de una serie de 50 minutos rollo Dimensión Desconocida o The Outer Limits por poner un par de ejemplos, y que aquí parece se alarga en exceso todo y su justa duración de hora y media. Aun y así, creo que merece la pena y gustará a los que disfruten de la ciencia ficción más calmada y más centrada en personajes que en efectos especiales.
