La joven actriz Amanda Seyfried es una de las posibles candidatas a protagonizar una nueva versión en plan gótico del cuento de la Caperucita Roja que se llamará The Girl with the Red Riding Hood. El film estará dirigido por Catherine Hardwicke, la directora de Crepúsculo.
Warner Bros. parece que quiere hacerse con los fans de la saga Crepúsculo para este nuevo film que tendrá elementos oscuros, peligrosos y románticos. El guión correrá a cargo del co-guionista de The Orphan, David Johnson, y nos mostrará a una Caperucita Roja a la que persigue un hombre lobo.
Cuanto daño está haciendo la dichosa saga de vampiros en el cine de género, aquí tenemos un intento más de emularla que seguramente será incapaz de lograr el éxito de Crepúsculo, el único interés que le encuentro es que Seyfried esté dentro del film, aunque preferiría verla en otros menesteres que en films de género con aires de romanticismos para adolescentes fanáticas.
3 comentarios
Después de ver En compañía de lobos, para que una película de Caperucita Roja me interese debe ser original, y no un insulso film que se suma a la moda del «terror romántico» (dicho esto no con el estilo que le daría un Poe). Creo que se puede hacer «terror para mujeres» sin insultar su inteligencia.
Yo la última adaptación de Caperucita Roja verdaderamente original que he visto es Hard Candy.
Después de eso, mucho se lo tienen que currar para superarlo…
Sé que la lluvia de fuego caerá sobre mí pero, honor y verdad ante todo: a ver, de verdad vale la pena tanto odio hacia Crepúsculo? Que nadie me entienda mal… los dos films estrenados hasta ahora (a ver qué hace David Slade con el tercero) no pasan de ser telefilms caros sin interés por desarrollar una mitología original, pero vamos, a mí no se me hicieron tan odiosos.
Lo que quiero decir es que, al igual que es absurdo el histerismo de las fans por este fenómeno artificialmente inflado, igual de exagerado me parece el convertir esta saga en culpable de todos los males actuales, de satanizarla como algo contra lo que hay que luchar con vehemencia.
Porque, siendo honestos, todos los años, dentro y fuera de Hollywood, se hacen películas a patadas dirigidas a nosotros, los aficionados al terror y la fantasía, llenas de criaturas, superheroes y testosterona. Acaso no tienen las adolescentes quinceañeras derecho a un producto para ellas, aunque nos parezca un cine fantástico sin esencia?