Tras el gran éxito de Dragon Ball, quizás la serie que seguidamente recogió el testigo y haya sido una de sus más longevas sucesoras, junto con One Piece, sea Naruto, la historia de un joven ninja en un universo en donde existen aldeas de ninjas cada una de ellas dedicada a un elemento. Nacido como un paria, su desatado optimismo le empuja a aspirar a convertirse en el Hokage de su aldea. Masashi Kishimoto es el creador del manga que ha sido llevado a la televisión con una longeva serie y su continuación, Naruto shippuden.
Naruto esconde en su interior al Zorro de las Nueve Colas, un demonio legendario que atacó la aldea y cuyo líder sacrificó su vida sellándolo en el interior de su hijo recién nacido, Naruto. Esto hizo que el niño fuera visto como una amenaza y todos le temieran, convirtiéndolo en casi un marginado en su propia aldea. A los doce años, Naruto se gradúa en la escuela ninja, y es cuando da comienzo la historia, en la que veremos como el joven Naruto crece y va desarrollando sus poderes.
Lionsgate es quien tiene los derechos de la obra y contará con la dirección de Michael Gracey, un especialista en efectos visuales que estrenará el año que viene The Greatest Showman, su primer film, un biopic sobre el showman americano P.T. Barnum.
Después del desastre que fue la adaptación de Dragon Ball hace unos años, o la de Avatar, es de esperar que no hagan algo parecido con Naruto, y más viendo que la adaptación de Ghost in the Shell tiene bastante buena pinta, al menos visualmente. Con Naruto, Lionsgate tiene una gran franquicia entre manos si sabe hacer bien las cosas, aunque adaptar el mundo del manga no va a ser tarea fácil.