Más Allá de Sitges 2012 II: Insensibles, Holy Motors, Le Magasin des Suicides y John Dies at the End

Segundo día de festival, día duro después de la maratón de ayer que acabó a las 4 de la mañana y del madrugón para asistir a la primera sesión de las ocho y media, pero es el segundo día, todavía estamos frescos y se puede aguantar, eso sí, hoy a tocado retirarse pronto que tampoco hay que forzar la máquina, que quedan muchos días por delante.

Insensibles: Film de producción catalana que a mi parecer hubiera sido mucho mejor película inaugural que la elegida este año de El Cuerpo. Mucho más original, bien construida, y mucho más de género. Insensibles nos cuenta la historia de un médico al que se le detecta un cáncer para el que necesita un trasplante de médula que sea totalmente compatible, con lo que acudirá a sus padres y acabará descubriendo terribles secretos que se ocultan en su pasado.

Mientras el médico investiga su pasado, se nos van mostrando a modo de flashbacks la historia de un grupo de niños con una extraña condición, se totalmente insensibles al dolor. Estos niños, después de causar varios problemas acaban internados en un hospital donde serán tratados por un profesor alemán, pero la guerra civil hará imposible la comprensión que necesitan estos niños.

Como ya digo, me ha parecido mucho más redonda que la película inaugural, con lo que aun me queda esperanza para el cine patrio que nos queda por venir. Buenas actuaciones de todos los implicados, incluso de los niños, un guión muy consistente tanto en la historia del pasado como en la del presente, las dos atrapan por partes iguales y se van encontrando poco a poco. Quizás encuentro el final un pelín flojo, está bien rematado, pero le falta fuerza. Por lo demás, una buena nota.

Holy Motors: Sin duda el film más extraño, inclasificable e incomprensible que podremos ver en Sitges este año, lo cual no es sinónimo de mala película, sino todo lo contrario, es tal rareza que no puedo más que recomendar a todo el que se atreva su visionado. La cosa va así a groso modo, de un hombre que sale a trabajar por la mañana en su limusina y se dedica a interpretar diversos y dispares personajes para los que se maquilla y cambia su aspecto.

Pese a lo bizarro de su propuesta, el film fascina y atrapa, te dejas llevar para ver hasta donde es capaz de llevarte, y sobre todo en su parte final, sorprende y te deja flipando con sus inesperadas salidas. No todo es bueno, hay momentos en que la trama decae mucho y el personaje interpretado resulta pesado y con poco interés, todo hay que decirlo.

Leos Carax construye un film alejado de toda lógica y de raciocinio, difícil de interpretar y de comprender, si es que hay algo que comprender. Denis Lavan es desde ya el premio al mejor actor del festival, no habrá película con una interpretación que se le acerque, y tampoco sería de extrañar que el jurado se declarará partidario de premiar el film con algo más.

Le Magasin des Suicides: Película de animación del famoso director francés Patrice Leconte que acaba resultando demasiado blanda y predecible, a lo que hay que sumarle que cada cinco minutos se ponen a cantar con el correspondiente sufrimiento de este que os escribe, al que los musicales no son lo suyo salvo en contadas excepciones.

Lo que tenemos es un film que dura bien poco, una hora y cuarto, con un buen puñado de números musicales, sin los cuales el film duraría la mitad, y es que igual la novela gráfica, que no he tenido el placer de leer, en la que se basa no daba para estirar tanto y han tenido que llenar a base de música y canciones.

Le Magasin des Suicides nos presenta una ciudad oscura y deprimente cuyos habitantes tienen una clara tendencia al suicidio. En medio de la ciudad está la tienda de los suicidas, donde encontrar todos los artículos necesarios para tener una muerte de cualquier manera imaginable, desde la típica cuerda para ahorcarse hasta venenos, espadas, cuchillas de afeitar afiladas a conciencia y un variado sinfín de elementos para todos los gustos. Pero la llegada del nuevo bebé a la familia, incomprensiblemente feliz, tendrá un impacto demoledor en el negocio familiar. Una pequeña decepción de un film animado del que esperaba algo más que canción tras canción, ni punto de comparación con la sensibilidad y la emotividad de un film como El Ilusionista por poner un ejemplo de animación reciente y de estilo parecido.

John Dies at the End: Coscarelli recibe La Máquina del Temps y se marca un discurso totalmente en castellano que arranca sonoros aplausos de todos los asistentes. El esperadísimo regreso de Coscarelli es un film divertido y gamberro hasta límites insospechados por mucho que os lo digan de antemano. Nos encontramos con dos amigos que se verán envueltos en una serie de aventuras totalmente surrealistas y disparatadas.

Coscarelli conjuga todos los géneros, desde el terror a la ciencia ficción, todo pasado por el filtro de la comedia mas alocada en la que no faltan buenas dosis de sangre, monstruos y desmembramientos.

John Dies at the End es una especie de Las Locas Aventuras de Bill y Ted pero con mucha más mala leche y con mucho más gore. Es tanto el desfase que llega a impregnar el film que la cosa puede acabar empachando cuando se le va de las manos a Coscarelli, unas cuantas tonterías hacen gracia pero todo tiene un límite, es fácil que uno se llega a empachar y perder con tanto desvarío. Hay que estar muy predispuesto a dejarse llevar y a no buscarle un sentido a nada si no quieres que el film te acabe abrumando. A mí me ha parecido una genialidad de lo más fresca y divertida.